¿A qué se conoce como ceguera nocturna o nictalopía?
Se refiere a una dificultad presentada por algunas personas que les impide parcial o totalmente la visión nocturna o con poca luz. Se puede hablar de intensidad de la reducción en dicha capacidad, más que indisposición absoluta y, por ello, se refiere a grados de disminución en la visión en sitios poco iluminados. En condiciones normales, nuestros ojos funcionan obturando o ampliando el rango de luz que permiten y esto facilita la visión en sitios poco iluminados.

Tratamientos para la ceguera nocturna
Como indicamos anteriormente, lo adecuado es identificar, primero que nada, lo que causa la ceguera nocturna. Una vez que se identifica, se procede a la evaluación de las alternativas de curación. Podemos observar por ejemplo:
- Para los problemas refractivos como miopía alta se puede optar por una cirugía láser o la implantación de lentes intraoculares.
- En el caso de las cataratas, la cirugía es la mejor opción. Es una intervención en la que se reemplaza el cristalino por un lente artificial que optimiza la entrada de luz.
- En los casos en los que la ceguera nocturna es producto de retinopatía diabética, el control es enfoque múltiple, pues se debe tratar la diabetes en primer término.
- En otros casos como la presencia del queratocono o con el glaucoma, la solucion es quirúrgica. En estos casos se implantan anillos intracorneales que detienen el avance de este tipo de dolencias.
Principales síntomas de la nictalopía
Si bien lo esencial es que no vemos bien de noche, existen algunos indicios complementarios:
- Fallas en la adaptación a los cambios de luminosidad en un ambiente determinado. Comúnmente al entrar en una zona poco iluminada, cuando venimos de un ambiente normal en cuanto a luz disponible.
- Dificultades de enfoque en periodos nocturnos o vespertinos. Se nota, sobre todo, cuando tenemos dificultades en la conducción de vehículos a esas horas.
- Problemas de enfoque y reconocimiento de imágenes comunes que deberíamos identificar inmediatamente. Sucede, sobre todo, en el caso de los rostros, por sus características específicas.
Tratamientos para la ceguera nocturna
Como indicamos anteriormente, lo adecuado es identificar, primero que nada, lo que causa la ceguera nocturna. Una vez que se identifica, se procede a la evaluación de las alternativas de curación. Podemos observar por ejemplo:
- Los problemas refractivos como miopía alta, deben tratarse con asignación de lentes formulados para el problema. Asimismo, se puede optar por una cirugía láser o la implantación de lentes intraoculares.
- En el caso de las cataratas, la cirugía es la mejor opción. Es una intervención en la que se reemplaza el cristalino por un lente artificial que optimiza la entrada de luz.
- En los casos en los que la ceguera nocturna es producto de retinopatía diabética, el control es enfoque múltiple, pues se debe tratar la diabetes en primer término.
- En otros casos como la presencia del queratocono o con el glaucoma, la solucion es quirúrgica. En estos casos se implantan anillos intracorneales que detienen el avance de este tipo de dolencias.